Los concejales de la formación liberal en Villafranca de Ebro, La Puebla de Alfindén y Fuentes piden a la Confederación Hidrográfica del Ebro que realice limpiezas puntuales en el cauce para evitar futuros problemas en las localidades ribereñas
Concejales de Ciudadanos en las localidades de Villafranca de Ebro, La Puebla de Alfindén y Fuentes de Ebro han advertido de la presencia de una gran isla de grava en el río Ebro, a su paso en el puente de la Z-40, que podría causar afecciones en los municipios ribereños aguas abajo de Zaragoza en caso de que se produzca una riada. Por ello, han solicitado a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) que realice limpiezas puntuales y un mantenimiento en aquellos puntos donde se depositan elementos vegetales o grava, para evitar problemas en futuras avenidas.
Los diputados provinciales Conrado Gayán, también portavoz de Cs en Fuentes de Ebro, y Nicolás Cativiela han visitado la zona junto a los concejales de la formación naranja en Villafranca, Juan Carlos Espinosa, y La Puebla de Alfindén, Raquel Borruecos e Iván Vera, para conocer el estado del río en este punto. “La acumulación de grava aquí es una afección directa de la construcción del puente en 2008 y riada tras riada ha aumentado la presencia de materiales depositados”, ha explicado el portavoz de Cs en la Diputación de Zaragoza y en Fuentes de Ebro, Conrado Gayán.
Recientemente se han realizado trabajos para retirar la vegetación que se había acumulado en esta isla con el objetivo de que el agua arrastre los materiales, pero si se registrara una fuerte crecida “la grava y toda la vegetación y residuos que arrastrara el agua acabarían depositados aguas abajo y podrían causar problemas a todos los municipios ribereños, empezando por Pastriz”, ha indicado, para recordar que ahora “una avenida ordinaria de 800 o 1.000 metros cúbicos causa efectos extraordinarios”.
“Cuando venga una riada un poco fuerte la grava de esta isla irá aguas abajo y allí tenemos también islas en el cauce”, ha manifestado el portavoz de la formación naranja en Villafranca, Juan Carlos Espinosa. Además, ha señalado que en esta zona “tenemos otro problema que es la ARA-A1, en cuyos pilares tropiezan troncos y vegetales y que acabaría produciendo un efecto dique, como ocurrió en la riada de 2015, cuando el agua destrozó la autopista aragonesa y anegó los campos cercanos durante días”.
Por su parte, la portavoz en La Puebla, Raquel Borruecos, ha considerado que sería necesario acometer limpiezas “de forma puntual, pero continuas en el tiempo” para evitar este tipo de problemas, siempre “respetando las directivas europeas, el medio ambiente y la fauna y vegetación de la ribera”.