La formación liberal presenta una iniciativa para instar al Gobierno de Aragón a suavizar las restricciones a la hostelería y aumentar las ayudas directas
El Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Teruel defenderá en el pleno de mañana una iniciativa en la que insta al Gobierno de Aragón a permitir la apertura del interior de los bares y restaurantes al 25% para que sus propietarios puedan cubrir gastos y mantener la actividad. Además, la formación liberal reclama al Ejecutivo autonómico “un plan de choque con créditos a interés de cero y ayudas directas que evite la quiebra de un sector vital para la economía de la ciudad”.
Su portavoz, Ramón Fuertes, ha insistido en la necesidad de apoyar la hostelería, el ocio nocturno y el turismo desde todas las instituciones con el objetivo de “unir fuerzas para que los negocios puedan mantener la persiana subida”. “El sector ha salido a la calle porque está al límite. Los bares de Teruel empiezan a colgar el cartel de ‘se traspasa’ y el Gobierno de España y el Ejecutivo autonómico no pueden quedarse de brazos cruzados. La hostelería ha demostrado que sabe mantener entornos seguros y cumplir con las estrictas normas, por lo que no merecen este castigo”, ha señalado Fuertes.
En ese sentido, el portavoz de Cs ha subrayado que la formación liberal “ha apoyado durante estas semanas las medidas del Gobierno de Aragón que son buenas para combatir la pandemia”, aunque ha aseverado que, en este caso, “es necesario exigir con firmeza al Ejecutivo autonómico que enmiende este error y no permita la quiebra de la hostelería turolense”.
“Ciudadanos pide que todos los grupos municipales de Teruel nos unamos para rechazar la demonización de la hostelería y mostrar un apoyo sin fisuras a un sector vital para nuestra economía y nuestra forma de vida”, ha comentado Fuertes, quien recuerda que la mayoría de contagios se producen en reuniones sociales y familiares, por lo que la hostelería es “una alternativa segura y es parte de la solución, no del problema”.
Finalmente, Fuertes ha recordado que la prohibición de consumir dentro de los bares es “una ruina para un sector del que dependen cientos de familias en Teruel y multitud de negocios como distribución de bebidas, carnicerías, panaderías, transporte etc.”.